Antonio Luquero | Vallecasweb
La Carrera del Rayismo ha vuelto a ser, otro año más, todo un éxito. Resulta asombroso que una prueba organizada única y exclusivamente por Aficionados tenga más aceptación y cuente con mejor organización que cualquier evento en el que esté detrás la empresa Rayo Vallecano de Madrid Sociedad Anónima Deportiva.

En esta nueva edición de la Carrera del Rayismo hubo algunas expresiones que se escucharon de forma recurrente: “¡Qué pasada!”, “¡Qué dura!”, “¡Qué bien organizada!”. Pero destacó una palabra que salía de la boca de todos aquellos que llegaban a la meta situada dentro del Estadio de Vallecas: “¡GRACIAS!”.

Las “gracias” iban dirigidas a todos aquellos que hicieron posible esta nueva Fiesta del Rayismo. Porque eventos de estas características sólo pueden ponerse en marcha de dos maneras: teniendo mucho dinero, o disponiendo de apenas recursos pero contando con la ilusión y el trabajo desinteresado de cientos de personas.

La Carrera del Rayismo se encuentra, evidentemente, en el segundo supuesto: mucha gente con ganas de hacer cosas por los demás pero sin tener apenas apoyo. Sólo así se explica que más de 150 voluntarios funcionaran con la precisión de un reloj suizo para que alrededor de 3.100 participantes derrocharan sudor y esfuerzo por las empinadas calles vallecanas, matadoras en las subidas y reventadoras en las bajadas, en un circuito de algo más de 10 kilómetros que los menos osados recortaron a la mitad: 5 kilómetros.

Hay dos características que definen el buen funcionamiento de la Carrera del Rayismo. Por un lado, que afortunadamente el Rayo Vallecano no participa en su organización lo que garantiza que no va a salir mal. Por el otro, que la Plataforma ADRV —en la que se integra la inmensa mayoría de colectivos y peñas rayistas— está al frente de la prueba, lo que asegura el éxito y aporta unas inmensas dosis de cariño, cualidad de la que adolece un Club que no mira más allá de las decenas de millones de euros con las que el fútbol riega sus arcas. Una vez más, se evidencia que el dinero y el cariño se repelen como el agua y el aceite, pero los aficionados prefieren que les quieran antes de participar en eventos sin alma alguna.

Las carreras infantiles fueron todo un espectáculo. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Los participantes en las pruebas de 5 y 10 kilómetros agotaron las inscripciones. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Organización perfecta. En la imagen, zona de guardarropa para los corredores. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

La Carrera del Rayismo demuestra que la unión entre aficionados y periodistas puede ser armoniosa. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Un corredor disfruta de su momento de felicidad al entrar en la meta del Estadio de Vallecas. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Jorge Morales, rayista de pro, corrió con una bandera con el escudo de la ADRV. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

La atleta Sara Benedí entrevistada por Fernando Sebastián, locutor de la prueba, tras su triunfo en la categoría femenina. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Llegar a la meta no es sólo un triunfo personal, sino también del Rayismo. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Los tres primeros clasificados de las distintas categorías de adultos recibieron un precioso y singular trofeo. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

Un photocall “estilo San Silvestre” permitió premiar a los primeros clasificados. Maite Martín, periodista del diario As, y Antonio Mora, presidente de la Federación de Peñas del Rayo Vallecano, entregaron los trofeos. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)

El escudo de la Agrupación Deportiva Rayo Vallecano tiene la forma similar a un corazón, el mismo que latió en cada llegada, en cada beso, en cada aplauso desde la grada hacia los que consumaban el esfuerzo, en cada voz de ánimo de los voluntarios hacia los corredores, en la ayuda mutua, en el trato exquisito y cariñoso hacia los menores que lo dieron todo en las emocionantes carreras de “peques”.

Una prueba así, íntegramente vallecana, con salida y meta en Vallecas y un número limitado de inscripciones que se agotan edición tras edición, no sólo es un lujo sino una verdadera heroicidad. Habría que pedirle a “Madrid” un poquito más de esfuerzo a la hora de afrontar próximas ediciones. Por ejemplo, aportando más Policía Municipal para que los cortes de tráfico sean seguros durante el desarrollo de la prueba en el exterior, aunque evidentemente no hubo ninguna incidencia.

Cuando terminadas todas las carreras veo a varias decenas de voluntarios, como un reguero de hormiguitas, cargando pesadas vallas de hierro por las escaleras de la Tribuna Baja de la Avenida de la Albufera, alguien me pregunta qué le pediría al Club para la próxima edición de la Carrera del Rayismo. Visto el éxito de la ésta y de las ediciones anteriores, la respuesta es bien sencilla: que siga manteniéndose al margen.

(*) En la imagen que abre esta información, la V Carrera del Rayismo ha sido todo un éxito gracias a la colaboración de más de 150 voluntarios y voluntarias. (© Foto: A. LUQUERO / Vallecasweb.com)